Nuestro querido y hermoso Planetario Galileo Galilei, que celebrará su 50 aniversario en junio próximo, estará cerrado seis meses para la puesta en valor prevista por el Gobierno porteño.
La misma busca convertirlo en un espacio con tecnología e innovación a través de una nueva iluminación en su cúpula, que proyectará imágenes del universo.
A su vez, se realizarán cambios en el espacio verde que lo rodea.
Todas estas novedades, fueron informadas por los ministros de Modernización, Andy Freire; y de Ambiente y Espacio Público, Eduardo Macchiavelli, quienes coincidieron en la necesidad de “llevar al Siglo XXI” al Planetario, inaugurado en junio de 1967 en el Parque Tres de Febrero del barrio de Palermo, y transformar a este ícono urbano porteño en uno también tecnológico.
Uno de los puntos de la atractiva renovación será, el aumento de la calidad de la pantalla principal que cubre todo el interior del domo de la sala de proyección semiesférica, que cuenta con unas 360 butacas, para que los visitantes puedan vivir nuevas experiencias sensoriales ya que, en términos técnicos, se va a pasar a una calidad de 4K a 8K.
Otra de las renovaciones será, la aplicación de animaciones a través del sistema de mapeo o mapping mediante el cual se reflejarán imágenes sobre la superficie de la tradicional cúpula del Planetario, que tiene unos 20 metros de diámetro.
También se sumara, el denominado “Anillo de Saturno”, que en la actualidad está compuesto por los ventanales que rodean al edificio, una serie de módulos de pantallas LED que completarán el efecto de animación de la cúpula.
Para lograr la meta, el edificio encargado de la divulgación astronómica ya cerró el 15 de enero pasado, como habitualmente lo hace cada año por un mes, pero en esta oportunidad no está prevista la reapertura sino hasta dentro de un semestre, aproximadamente, debido a las obras planificadas, las que demandarán una inversión de unos 95 millones de pesos.
El Planetario tiene cinco pisos, seis escaleras -una helicoidal-, la sala de proyección central y otra más pequeña utilizada para muestras temporarias.
También alberga una colección de meteoritos provenientes del norte argentino y es visitado anualmente por medio millón de personas, en su mayoría, estudiantes.
Otras de las novedades estará en el espacio público que linda con el Planetario, que se extiende por unas cinco hectáreas, donde se prevé mejorar las zonas verdes a través de la renovación de la tierra con la intención también de crear superficies ondulantes que se conviertan en un anfiteatro natural desde donde se pueda observar el edificio.
Otro de los trabajos que se realizaran, serán en el lago regulador del predio, específicamente en el sistema de compuertas, para evitar los desbordes del espejo de agua que se registran cuando caen abundantes lluvias, y se incorporará una fuente de aguas danzantes.
También se buscará darle al Planetario un logo que lo represente, para lo cual se abrirá una convocatoria a los vecinos, a través de las cuentas en redes sociales del Gobierno local y del sitio web de Secretaría de Participación Ciudadana, para que elijan entre cuatro opciones.
Por otro lado también se informó que desde el 4 de marzo el frente del Planetario, que está actualmente tapiado por el comienzo de las obras, registrará una intervención artística sobre el cerco perimetral, para transformarlo en murales pintados por autores locales; así como también se estudia la posibilidad de desplegar opciones para continuar con la divulgación astronómica fuera del predio durante las vacaciones de invierno.
Queremos recuperar un espacio de disfrute que rodea el Planetario que antes era un poco anárquico y que solía estar dañado, indicó Machiavelli.
En tanto, Freire dijo que quieren llevar el Planetario al Siglo XXI que hoy es un gran espacio para la divulgación y la investigación, pero queremos potenciarlo para que también sea una referencia ineludible para la innovación y la tecnología.