Un nuevo 25 de Mayo en Buenos Aires, especial para reunirse con familiares y amigos. La mesa está servida. ¿El menú? En línea con la tradición, muchos elegirían algo así: de entrada, una empanada o una humita; de plato principal, el infaltable locro (que si está rico y hace frío, se repite); de postre, un arroz con leche, con canela y dulce de leche; y, con el café, no se le puede decir que no a un pastelito de batata o de membrillo.
Lo que no todos saben es que una comida de tales proporciones, a la que se le sumara vino, gaseosas o pan, podría implicar la ingesta de casi 2000 calorías. ¿Existe alguna manera de hacerlas más saludables?
“Las fechas patrias son un momento especial para compartir, para encontrarse y comer los platos típicos que nos reenvían hacia la tradición”, consideró Viviana Videla Linares, nutricionista de las Estaciones Saludables de la ciudad y agregó: “Pero hay que tener en cuenta que esas mismas comidas pueden elaborarse de manera que resulten más saludables y sanas”.
Si hubiera que hacer un ranking calórico de las comidas patrias el locro quedaría primero, ya que una porción de unos trescientos gramos puede tener más de de 550 calorías. “Esto se debe a que el tradicional tiene cortes de carne como el osobuco que, junto al chorizo colorado y la panceta aportan mucha grasa”, explicó Videla Linares y agregó: “Una opción saludable es medir la porción y cambiar los cortes por otros más magros, lo que mejora el perfil de la preparación”.
Y es que con las temperaturas cada vez más bajas, es tentador comer unas humitas en la casa de comidas típicas del barrio. Pero atención, cada una tiene cerca de 230 calorías. “Es una comida con ingredientes muy saludables: cebolla, choclo, zapallo y condimentos; pero para hacerla más sana se puede medir la cantidad y sumar una guarnición, que puede ser una buena ensalada”.
¿Y qué pasa a la hora de los postres? Entre los clásicos regionales se suelen destacar los pastelitos criollos y el arroz con leche. ¿Hay una opción saludable para estas delicias coloniales? Para Videla Linares, la opción es hacer los pastelitos al horno y con masa integral, en tanto usar leche descremada y edulcorante apto para cocción (y evitar el dulce de leche) en el otro tradicional plato.
Pero atención: el equipo de nutricionistas de la Ciudad aclara que, para considerar saludable a una comida, no sólo importan las calorías. “Es un dato más, que hay que tener en cuenta junto con otros, como el origen de los alimentos y cómo están preparados”, explicó Videla Linares.
Tips saludables y comidas típicas
El equipo de nutricionistas de las Estaciones Saludables, dependiente de la Subsecretaría de Bienestar Ciudadano porteña, recomienda los siguientes tips y consejos para que las comidas patrias sean también una propuesta de sana alimentación:
- Locro: una porción de 300 gramos puede superar las 550 calorías. Consejo saludable: porciones más chicas, usar cortes de carne magros, agregar más verduras y reducir las cantidades de chorizo colorado o panceta.
- Carbonada: al igual que el locro, reducir las porciones, elegir cortes magros y evitar el consumo exagerado de chorizo colorado y panceta.
- Humita: cada humita puede incluir más de 300 calorías. Consejo saludable: acompañar con ensaladas y disminuir el consumo de unidades.
- Empanadas criollas: cada empanada de carne tiene 350 calorías. Consejo saludable: elegir un cortes magros para el relleno o retirar la grasa; hacerlas al horno, en lugar de fritas; usar discos de harina integral, reducidos en grasas.
- Pastelitos: llevan harina, manteca, dulce y, los tradicionales, son fritos. Por eso cada pastelito tiene 250 calorías. Consejo saludable: hacer la masa con harina integral y hornearlos en lugar de freirlos.
- Arroz con leche: la porción puede tener 250 calorías. Consejo saludable: para hacerlo más sano, puede elegirse leche descremada y evitar el uso abundante de azúcar o dulce de leche. Además se le puede dar sabor con edulcorante para cocción.
Nutricionistas en las Estaciones Saludables
Las Estaciones Saludables buscan impulsar el bienestar de los vecinos a través de la concientización y promoción de hábitos saludables, por eso enfermeros y nutricionistas buscan acompañar al vecino para que, paso a paso, pueda incorporar hábitos saludables a su estilo de vida.
En los 40 puntos estratégicos donde se encuentran ubicadas, se pueden realizar de forma gratuita controles básicos de salud como peso, talla, glucemia y presión arterial. Además, en las 10 estaciones fijas hay servicios de asesoría en alimentación saludable para todas las edades; clases de actividad física al aire libre; charlas y/o talleres sobre temas de interés; y actividades para adultos mayores, entre otras.
También, la ciudad tiene su Chat Saludable, todos los lunes de 12.30 a 16.30, donde se pueden hacer consultas y asesoramiento a una nutricionista del equipo porteño.
Agradecimiento: Restaurante El Rincón Jujeño