Un fuerte choque entre dos colectivos paralizó el tránsito este lunes en pleno Palermo y dejó al menos seis heridos, entre ellos ambos choferes.
El accidente ocurrió en la intersección de las avenidas Luis María Campos y Dorrego, generando una rápida movilización de equipos de emergencia y preocupación entre los pasajeros y vecinos.
Sentimos un golpe seco y enseguida los gritos. Algunos pasajeros salieron por sus propios medios, pero otros necesitaban ayuda, relató una testigo a Crónica HD, medio que cubrió el hecho desde el lugar del impacto.
El incidente se produjo cerca del mediodía, cuando por causas que aún se investigan, un colectivo de la línea 15 colisionó violentamente contra la parte trasera de una unidad de la línea 64.
El impacto fue tal que la trompa del interno de la 15 quedó seriamente dañada, mientras que el vehículo de la 64 mostró abolladuras y roturas en la parte posterior.
Inmediatamente, un llamado al 911 alertó a las autoridades sobre el accidente. En pocos minutos llegaron al cruce de Luis María Campos y Dorrego efectivos de la Comisaría Vecinal 14B y ambulancias del SAME.
Según fuentes policiales, hubo ocho personas afectadas por el siniestro, aunque sólo seis debieron ser trasladadas al hospital, la mayoría con politraumatismos leves y golpes. Entre los heridos estaban los conductores de ambas unidades.
El tránsito en la zona se volvió un caos. Varios carriles debieron ser cortados para facilitar la atención de los heridos y la remoción de los vehículos, generando demoras importantes durante más de una hora en uno de los nodos más transitados del barrio porteño.
Personal de Tránsito de la Ciudad organizó desvíos mientras se realizaban las pericias correspondientes para determinar qué originó el siniestro.
Algunos pasajeros resultaron con cortes producto de los vidrios rotos o golpes contra las estructuras internas de los colectivos. «Fue un momento de mucho nerviosismo, la gente gritaba, algunos lloraban, no sabíamos qué había pasado», contó uno de los damnificados.
La hipótesis principal que manejan los investigadores es que el colectivo de la línea 15 no logró frenar a tiempo y terminó embistiendo al 64, aunque no se descarta una falla mecánica o distracción al volante. Los peritajes en ambos vehículos y los registros de las cámaras de seguridad de la zona serán claves para esclarecer los hechos.
Desde el SAME informaron que todos los heridos fueron trasladados al Hospital Fernández y se encuentran fuera de peligro. “Afortunadamente no hubo que lamentar víctimas fatales ni heridos de gravedad”, sostuvo un vocero del organismo sanitario.
El accidente volvió a encender la alarma sobre el estado del transporte público en la ciudad. A diario, miles de personas utilizan estas líneas para trasladarse por Buenos Aires, y hechos como el de hoy reavivan el debate sobre la necesidad de controles más estrictos tanto en los vehículos como en las condiciones laborales de los choferes, que suelen estar sometidos a jornadas extensas y con poco descanso.
En este sentido, especialistas en seguridad vial insisten en la importancia de reducir los márgenes de error humano mediante capacitación constante, chequeos técnicos periódicos y condiciones de trabajo más humanas. “La seguridad vial no es solo infraestructura, también es prevención y cuidado del factor humano”, declaró en su momento el especialista Pablo Martínez Carignano, titular de la Agencia Nacional de Seguridad Vial.
El cruce de Luis María Campos y Dorrego, donde ocurrió el accidente, es una intersección muy transitada, sobre todo en horas pico, y ya ha sido escenario de otros siniestros viales.
Vecinos de la zona reclaman desde hace tiempo la instalación de semáforos más visibles, mejor señalización y controles más estrictos en los horarios de mayor circulación.
A pesar del susto y las heridas, la rápida intervención de los servicios de emergencia evitó consecuencias más graves.
Las autoridades confirmaron que en las próximas horas se conocerán los resultados de las pericias y se definirá si hubo responsabilidad directa de alguno de los conductores.